
El llamado presupuesto ajustado es un esbozo de las prioridades del gobierno, que dará a los congresistas republicanos un plan para empezar a elaborar proyectos de ley de gasto.
Como primer presupuesto de Trump desde que recuperó el poder, se propone cumplir sus promesas de aumentar el gasto en las fuerzas armadas y la seguridad fronteriza, al tiempo que recorta la burocracia federal.
«En este momento crítico, necesitamos un presupuesto histórico, uno que ponga fin a la financiación de nuestro declive, ponga a los estadounidenses en primer lugar y ofrezca un apoyo sin precedentes a nuestras fuerzas armadas y a la seguridad nacional», dijo el director de la OMB, Russ Vought, en el comunicado.
El gobierno federal tiene actualmente una creciente deuda de 36 billones de dólares y algunos conservadores fiscales y expertos en presupuesto temen que el proyecto de ley de recorte de impuestos de Trump se sume a ella sin suficientes recortes de gastos.
Trump está presionando al Congreso -bajo control republicano- para que extienda los recortes de impuestos de 2017, que fueron su principal logro legislativo en su primer mandato, que los pronosticadores no partidistas dicen que podrían agregar 5 billones de dólares a la deuda de la nación.
La solicitud presupuestaria anual de la Casa Blanca incluye previsiones económicas, así como propuestas detalladas sobre cuánto dinero debe gastar cada agencia gubernamental para el año fiscal que comienza el 1 de octubre. Los desembolsos en el año fiscal 2024 ascendieron a 6.8 billones de dólares, según la OMB.
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