Decisiones

La vida en sí misma es una solución, el hecho de existir nos da la herramienta fundamental ante cualquier adversidad por lo que los problemas siempre existirán en el mundo de las soluciones.

Sin embargo, la mala intelectualización y los razonamientos falsos nos pueden ir esquinando a lugares muy oscuros donde este mundo de solución pareciera no existir.

El pensamiento es la capacidad que tenemos los seres humanos para formar ideas y representaciones de la realidad en su mente, siempre relacionando unas con otras.

Esta capacidad va evolucionando mientras vamos creciendo, el individuo siempre irá incrementando su pensamiento con la influencia de absolutamente todo lo que lo rodea pero principalmente del colectivo social.

Pero qué sucede cuando en el desarrollo de este pensamiento comienzan a insertarse razonamientos falsos o erróneos, cuando recibimos estímulos a partir de la conveniencia de unos pocos y no del todos; como sucede en el marketing que basa sus mensajes en lo que unos cuantos creen que otros deben necesitar, pensar o creer plagando el pensamiento de masas forzandolo con la repetición y no con el razonamiento.

La modernidad nos trajo ya esta técnica muy pulida a partir del aprendizaje obtenido con las religiones y sus instituciones creadoras de imperios a base de creencias y necesidades donde solo un puñado de seres obtenía beneficios, hecho que a la fecha sigue inserto en la mayoría de los seres humanos, los cuales lamentablemente no sólo tenemos que sobrevivir con esta manipulación del pasado, sino también con la avanzada inserción de la sobre publicidad enfocada en el consumo y no solo de cosas materiales, también como en el pasado/presente de creencias e ideologías “casualmente” estructuradas para necesitar felicidades y sueños que ni siquiera son nuestros realmente.

¿Entonces cómo tomar decisiones acertadas?.

Aquí es muy importante saber diferenciar entre la toma de decisiones inmediatas y las que nos pueden generar una trascendencia de vida, es necesario ir equivocándonos en las decisiones para ir aprendiendo y lidiando con la frustración, además de ir cosechando la experiencia en el pensamiento para poder llegar a ser más asertivos, esto genera plasticidad cerebral y conexiones referenciales para prepararnos a entornos similares cuando tomamos una decisión.

Pero el mundo desde hace siglos se ha ido plagando de técnicas manipulatorias para coartar el libre desarrollo en la toma de decisiones, dándonos respuestas y soluciones inventadas a problemas inventados.

Inventar problemas y darnos su solución es uno de los pilares del neoliberalismo, lo pondré de este modo:

La mentalidad de escasez es cuando el cerebro entra en modo de pánico por no tener las necesidades básicas como alimento, seguridad, vivienda, amor, por mencionar algunos. Este modo de pánico en el que entra el cerebro lleva consigo toma de decisiones apresuradas, emocionales, básicamente nos hace actuar como idiotas aunque no lo seamos y lo peor de todo es que nos imposibilita a aprender generando un círculo vicioso con futuros inmediatos, medianos y a largo plazo sumamente terribles.

Por esta razón es que son de suma importancia las acciones del Estado en la solución a estos problemas básicos, alumbrado público, apoyos a la vivienda, regulación en la canasta básica, becas, etc.

Pero el neoliberalismo no sólo condenaba a la ruina a todas estas personas que por su circunstancia sufrían de la mentalidad de escasez, sino que también creó su propia mentalidad de escasez neoliberal basada en necesidades impuestas, en discursos engañosos y manipulatorios pero sobre todo en la construcción de una realidad inexistente.

El éxito siempre basado en el famoso sueño americano que por cierto siempre fue un sueño, basta con revisar las estadísticas. La felicidad eterna basada en necesidades superfluas, en cánones de belleza inalcanzables y sobre todo dañinos.

La inmediatez ha sido un punto fundamental dentro de esta manipulación de libre mercadeo, la búsqueda de “ser mejor” echándole muchas ganas como el truco más efectivo para formar un nuevo tipo de esclavitud, o bien la obtención de beneficios pasionales generalmente destinadas al hombre a costa de la cosificación de las mujeres torciendo la mente de ellas también con esta sobre exposición a formas supuestamente inmediatas de éxito.

Son inacabables los ejemplos como sumamente preocupante lo que todo esto genera a la cual llamo mentalidad de escasez neoliberal, donde no importa la tranquilidad de la medianía, donde no importa la plenitud que te puede llegar a dar tener lo fundamental y paz; no, al neoliberalismo y al libre mercado no le importa eso porque de hecho es inconveniente para ese sistema, por eso es que odian vehementemente cualquier tipo de comunitarismo, ya no sé diga socialismo y comunismo por su fundamento en la equidad, la igualdad y una vida digna y de bienestar para todas y todos.

El neoliberalismo necesita un mundo de inmediatez, sin compromiso, desechable, falso e irracional donde la toma de decisiones siempre sea errónea porque en el momento que comience a ser asertiva ese sistema comenzaría a despedazarse.